Un año más hemos tenido la suerte de poder disfrutar en Barcelona de este impresionante certamen tecnológico. El MWC (Mobile World Congress) es el evento de conectividad más grande e influyente del mundo. Este año ha tenido más de 100.000 asistentes procedentes de más de 200 países, 2.700 expositores y patrocinadores y más de 2.500 periodistas y analistas. A estos asistentes presenciales, hay que sumarle más de 400.000 espectadores virtuales a través de las conferencias emitidas en los canales oficiales, plataformas y medios asociados.
El tema que más se ha tratado y nombrado este año no podía ser otro que el de la Inteligencia Artificial. Casi todos los expositores, de una forma u otra lo tenían presente en sus productos, novedades o presentaciones, aunque realmente lo más espectacular han sido los robots y el coche volador, que por cierto nadie ha visto volar. Otras novedades que han concentrado miradas han sido los móviles flexibles, las pantallas transparentes o los móviles desarrollos con IA.
El MWC sigue siendo el congreso tecnológico más esperado del año. Y seguramente es el certamen más sorprendente porque representa a un sector que crece de forma exponencial y que cada día se reinventa. El nombre original de MWC corresponde a “Mobile World Congress”, ya que en sus inicios estaba orientado a la mobilidad, pero ha ido evolucionando hacia la conectividad inteligente y todo el entorno que la tecnología puede abarcar. No sólo es el 5G (ahora ya 6G), ahora abarca campos como comunicaciones en general, internet de las cosas, servicios en la nube, metaverso, telepresencia, inteligencia artificial …
Este año el certamen se ha presentado con el lema de “Velocity”, intentando quitarle protagonismo a las siglas que le ha dado nombre hasta la fecha.
El Mobile World Congress 2023 ha superado las expectativas, superando los 80.000 visitantes y los 2.000 expositores, pero no ha conseguido todavía los records previos a la pandemia. Aún así, sigue siendo el mayor evento mundial tecnológico.
El congreso tecnológico más esperado del año que se
celebra en febrero en Barcelona nos presenta siempre muchas novedades que
podemos aplicar en nuestro entorno náutico. En cada edición aparecen
tecnologías y productos que, sin estar pensadas inicialmente para este fin,
encuentran un hueco importante para situarse en un sector minoritario, y en
muchos casos olvidado, donde la tecnología cada vez es más importante.
El MWC ha pasado de ser un evento dedicado al “móvil” a
ser un certamen dedicado a las novedades tecnológicas en general, a la
conectividad, a los servicios en la nube, la inteligencia artificial, el
internet de las cosas, la robótica y a los “startups”. Incluso el sector del
automóvil está presente con vehículos destinados al “carsharing” que nos
invadirá en poco tiempo.
No por esta diversidad deja de ser el mejor escaparate
para que todos los fabricantes, excepto Apple, presenten sus primicias anuales y
compitan por atraer al visitante que sigue acudiendo a este congreso buscando
cual será su siguiente móvil.
Es un certamen internacional, con presencia de multitud de
paises, tanto en exposiciones como en visitantes.
La visita al MWC es obligada para los que estamos en el
sector de las Nuevas Tecnologías, y más con el privilegio de celebrarse en
España. Esperemos sea por mucho tiempo.
Para los que estamos en este mundo, la sensación de entrar
en el Mobile World Congress es similar a la de un niño cuando entra en DisneyWorld.
Entras con la boca abierta por lo que ves, y sales pensando que te han faltado
horas o dias para disfrutarlo todo.
El MWC es una dimensión desconocida a la que te vas
amoldando a medida que paseas por los ocho enormes e inacabables pabellones,
todos llenos de novedades. En el primer recorrido por todos ellos te acabas
perdiendo ante la cantidad de nuevas tecnologías y nuevas dimensiones que te
acechan por los pasillos. Es como un parque temático donde sabes que no te da
tiempo de entrar en todas atracciones. Necesitas como mínimo de un segundo dia
para profundizar e informarse en los temas que realmente me interesan.
En esta segunda vuelta reservo unas horas para dedicarlo
a ver novedades que puedan ser útiles para el secor náutico. Pero es curioso
que cada año, en alguno de los stands donde me acerco y explico la aplicación
nautica de veo en el producto que presentan, me dicen eso de “pues no habiamos
pensado en este sector…”.